¿Alguna vez te has preguntado quien y por qué inicia los mensajes en cadena?

Todos recibimos en mayor o menor medida mensajes en cadena de los más variopintos, desde el niño o la niña perdida, a las donaciones de grandes multinacionales a causas benéficas o incluso de temas personales supuestamente para tus amistades. Bien, pues resulta que el 99,99 % de tooooodos los e-mails en cadena que circula por la red son falsos (y quizás me esté quedando corto). Es tan fácil como buscar un poco en la red y al segundo encuentras que todo el contenido de esos mensajes es una patraña. Entonces, ¿por qué la gente los sigue reenviando una y otra vez? La respuesta es fácil, porque la gente no se preocupa de comprobar las cosas, aunque sean tan fácil como escribir 3 palabras del mail en google; y claro está, siempre que hay alguien que presente un punto débil allá que aparece algún otro listo que se aprovecha de ello. En este caso los que se aprovechan de esa dejadez de la gente son las empresas que se dedican al delictivo «negocio» del spam, ya que todas esas direcciones que van recopilando con los correos en cadena, luego las usan para sacar pelas llenando los correos de la gente con basura. Esto me recuerda aquella célebre predicción del tito bill sobre el spam, desde luego que vaya aciertos…

Evitar todo esto es fácil si la gente en lugar de hacer las cosas a lo loco comprobara lo que lee, e incluso sin comprobar la veracidad del tema usara el campo CCO en sus correos en lugar del campo Para.